Ante la inminente ejecución de una orden judicial de desalojo contra las Comunidades Mapuche Kinxikew y Melo, en el marco de un conflicto territorial, desde el Equipo Diocesano de Pastoral Aborigen de Neuquén expresan profunda preocupación y hacen un llamado urgente a las autoridades judiciales, políticas y legislativas “a buscar soluciones pacíficas a esta situación mediante instancias de diálogo genuino, respetuoso y con la participación de todas las partes involucradas”.
“El avance sobre territorios reclamados por Comunidades Indígenas sin haber resuelto los procesos de relevamiento, reconocimiento y titulación constituye no solo una vulneración de derechos, sino una profundización de la injusticia histórica que han sufrido los Pueblos Originarios en nuestro país”, expresan en un comunicado difundido este jueves 22 de mayo.
“Los desalojos, aunque ordenados por la justicia, lejos de saldar deudas pendientes, reabren heridas, fragmentan aún más nuestra sociedad y obstaculizan la reconciliación de la Argentina con su pasado genocida y racista”, indican y afirman que “no se puede construir un Estado democrático y plural ignorando los derechos de quienes fueron los primeros habitantes de esta tierra”.
El comunicado completo:
