“El nuevo escenario de conflicto hace parte de una larga cadena de amenazas y de hechos sistemáticos, generalizados y extendidos”, denuncian las Comunidades Indígenas.
Seis Autoridades Ancestrales y la Asociación de Cabildos Ukawe de Colombia denuncian amenazas contra miembros de las Comunidades Originarias por parte de grupos armados irregulares en el municipio de Caldono, situado en el departamento del Cauca.
De acuerdo con el comunicado conjunto, miembros de las disidencias de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y del Ejército de Liberación Nacional (ELN) amenazan a varios Líderes Indígenas y defensores de derechos humanos desde el pasado 10 de agosto en Caldono, por lo que instan a las autoridades nacionales a brindar garantías de seguridad en la zona.
“El nuevo escenario de conflicto hace parte de una larga cadena de amenazas y de hechos sistemáticos, generalizados y extendidos, dirigidos a desplegar escenarios de guerra y muerte por la disputa del control territorial”, alertan las Comunidades.
“Seguiremos defendiendo nuestro rol de agentes de paz y cuidadores de la vida”, puntualizan.
Asimismo, el Comunicado señala que por intermedio de lenguaje agreste y soez, núcleos paramilitares amenazan constantemente a líderes y a la Guardia Indígena con asesinarlos, “tales señalamientos no son más que una estrategia beligerante para desestabilizar nuestra dinámica política organizativa y de Gobierno propio”, sentencian.
De acuerdo al Instituto de Desarrollo para el Estudio y la Paz (Indepaz), en el presente año se han asesinado ciento quince líderes sociales y treinta y dos excombatientes, legado que dejó el Gobierno del entonces presidente Iván Duque.
Luego de décadas de conflicto armado en el que las masacres, desplazamientos y homicidios fueron aún más profundos que con otro tipo de poblaciones, como acaba de revelar la Comisión de la Verdad, en Colombia las Comunidades aún siguen sufriendo todos los días embates que afectan notablemente su desarrollo.
La violencia hacia Pueblos Indígenas en toda Latinoamérica no para. Son las Comunidades las que le están poniendo el pecho y la frente a la violencia estructural existente, producida por el narcotráfico y el rearmamiento de las disidencias de las FARC y al paramilitarismo. No solo viven el olvido estatal permanente, sino que son sometidas a discriminación, despojo de sus territorios y al genocidio físico y cultural.
El nuevo gobierno colombiano del Dr. Gustavo Petro se enfrenta a esta realidad, que si bien no le es desconocida es heredada, la zona del Cauca es una zona caliente, el proceso de paz no es bienvenido por todos los sectores, hay muchos intereses económicos en juego y tendrá que hacer uso de nuevas estrategias para, en su periodo de gobierno, encaminar una solución.
En esta tierra de Simón Bolivar viven ochenta y siete Pueblos Indígenas, establecidos en veintisiete departamentos, muchos de ellos en zona de conflicto y Petro asumió un compromiso con ellos, dijo que su gobierno es una historia nueva para Colombia que esperamos no sea solo un discurso más. Su Vicepresidente dijo “Gracias por haber creído que sí es posible cambiar la historia de Colombia”
Todos esperamos que sea realidad y verdad, tiene el apoyo de once millones de colombianos.
Con Telesur.