Fortaleza indígena que persiste

En la jornada del domingo 11 de agosto, en la Ciudad de Santa Fe, se desarrollaron una serie de actividades conmemorativas de los 30 años de la Reforma Constitucional, cuando se incorporaron los Derechos Indígenas a la Carta Magna, a través del artículo 75, inciso 17.

En el Museo de la Constitución Argentina se llevó adelante una ceremonia ancestral de bienvenida, donde miembros de Pueblos Indígenas participaron junto a ENDEPA.

Estuvieron presentes quienes semana a semana, en 1994, viajaban a Santa Fe durante los meses que duró la Asamblea Convencional Constituyente, fueron “los convencionales de pasillo”, que con mucha lucha y esfuerzo lograron el reconocimiento de sus derechos: Ángela Lanche del Pueblo Mocoví, Celestina Ávalos perteneciente al Pueblo Kolla, Segundo Huenaiuen del Pueblo Mapuche y Victorino Lorenzo del Pueblo Wichí, quienes luego se expresaron sobre su participación en la Reforma Constitucional en 1994.

Asimismo, se procedió a la presentación de un documento elaborado por ENDEPA, “NUEVA CONSTITUCIÓN CON VIEJOS PROBLEMAS: LAS DEMANDAS PENDIENTES DE LOS PUEBLOS INDÍGENAS”, que será presentado a legisladores nacionales, autoridades del poder ejecutivo nacional y provinciales, y a la sociedad en general, al cual adhieren diferentes instituciones y organizaciones aliadas en el acompañamiento a los Pueblos Indígenas.

En la oportunidad se proyectó la producción audiovisual “El final de una larga espera” y los testimonios de los protagonistas de aquel momento histórico.

Estos derechos constitucionales, plasmados en el artículo 75 inciso 17, establecen que garantizarlos es obligación de todas las autoridades de gobierno, especialmente del Congreso, siempre en el marco del mayor respeto a la democracia y a la Constitución Nacional.

El avance que significó el reconocimiento de la pluriculturalidad del Estado argentino desde la reforma constitucional no solo responde a la inquebrantable e histórica lucha de los Pueblos Indígenas por sus derechos, sino también al cumplimiento de sendas obligaciones del Estado argentino suscriptas en los tratados de derechos humanos.

Hoy, los Pueblos Indígenas son sujetos de derechos y de protección desde el paradigma de la autodeterminación, interculturalidad, participación y respeto, siendo el principal garante el Estado Nacional, pero en particular el Congreso de la Nación. No obstante, a lo largo de estos años, observamos con preocupación que siguen existiendo deudas históricas, simbólicas, legislativas y sociales con los Pueblos Indígenas de nuestro país.

A treinta años de la reforma constitucional argentina, la inseguridad jurídica que enfrentan los Pueblos Indígenas sobre sus territorios y los recursos naturales que en ella existen, es cada vez más extrema y exige una urgente intervención del Estado para garantizarlos.

Adjuntamos el documento: “NUEVA CONSTITUCIÓN CON VIEJOS PROBLEMAS: LAS DEMANDAS PENDIENTES DE LOS PUEBLOS INDÍGENAS”:

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