El 3 de junio de 2012, la ciudad de Loncopué se transformó en un hito histórico en las luchas populares en Argentina. Ese día se llevó a cabo el primer referéndum de cumplimiento obligatorio respecto de la opción de impulsar o rechazar emprendimientos de megaminería a cielo abierto.
El voto por el SI ponía en ejecución una ordenanza para prohibir este tipo de proyectos en la localidad, esto tendría validez si acudía a votar al menos la mitad de los ciudadanos y ciudadanas registrados en el padrón electoral.
El resultado fue contundente: votó el 72% de los 3061 empadronados y el 82% de los votantes optó por el Sí.
Un Sí, que quiso decir No. Luego de esta experiencia, Loncopué se convirtió en la primera ciudad en el país en prohibir la megaminería a cielo abierto.
A una década de ese día, recordamos la gesta que unificó a Pueblos Indígenas con sectores campesinos y urbanos, un bastión de referencia en la resistencia organizada a los proyectos que amenazan la salud y la vida en el territorio de las Comunidades.