El Conselho Indigenista Missionário (CIMI), mediante un comunicado, se solidariza con el Pueblo Guaraní Kaiowá de Tekoa Guapo’y y exige justicia por el asesinato de Vitor Fernandes, víctima de una violenta e ilegal acción de desalojo realizada por la Policía Militar (PM) del estado de Mato Grosso do Sul el viernes 24 de junio.
Las balas del terror. Foto: Pueblo Guaraní Kaiowá.
La acción de desalojo, sin orden judicial y realizada por un nutrido contingente de agentes de la policía antidisturbios PM en Amambai, estado de Mato Grosso do Sul, dio como resultado el asesinato de Vitor, indígena Guaraní Kaiowá de 42 años, dejando al menos otros nueve heridos por armas de fuego y proyectiles de goma, algunos de gravedad.
El sábado 25, según información del Hospital Regional de Amambai, tres miembros de la Comunidad fueron dados de alta de la hospitalización, pero al menos cuatro siguen internados, algunos con heridas de bala en la cabeza y otras regiones vitales del cuerpo. Uno todavía permanece en la Unidad de Cuidados Intensivos de Punta Porã.
Los reportes e imágenes del ataque indican que la Policía Militar utilizó vehículos, armas letales y no letales e incluso un helicóptero como plataforma de tiro contra las familias Indígenas, incluidos niños y ancianos.
Debido a la desproporcionalidad y brutalidad de la acción policial, calificada por la Aty Guasu -Gran Asamblea Guaraní y Kaiowá- como la “Masacre de Guapo’y”, los dirigentes seguían buscando el sábado otros posibles muertos y heridos.
Las fotos y videos que circulan en redes sociales muestran que se trató de un operativo de guerra contra la Comunidad Indígena, realizado sin autorización judicial, dejando en evidencia la opción de las fuerzas de seguridad del Estado por el agente invasor, en este caso el agronegocio y el capital, dejando muerte y barbarie.
“En los últimos años, el estado de Mato Grosso do Sul tiene una larga historia de uso de las fuerzas de seguridad pública, especialmente la Policía Militar, en desalojos ilegales e invariablemente violentos contra Indígenas. La desastrosa acción contra Tekoa Guapo’y suma un capítulo más a esta triste historia”, expresaron desde el CIMI.
“La justificación presentada por la Secretaría de Seguridad Pública del Estado, en conferencia de prensa sobre el caso, reproduce una serie de prejuicios contra los Pueblos Indígenas y no se sustenta en la realidad de los hechos”, indicaron.
“Contrariamente a lo que dice el Estado, no se trató de una acción para combatir el narcotráfico, sino de una acción de desalojo contra una recuperación del Pueblo Guaraní Kaiowá que no pudo darse por falta de orden judicial y por disputas posesorias que involucran a Pueblos Indígenas. Son un asunto de jurisdicción federal, no estatal”, explicaron desde el Consejo.
Asimismo, dieron a conocer que el movimiento para la recuperación del territorio de Tekoa Guapo’y, un área contigua a la Reserva Indígena Amambai, comenzó a finales de mayo, cuando Alex Lopes, Guaraní Kaiowá de 17 años, fue asesinado cobardemente en una zona que pertenece a la Reserva Indígena Taquaperi, en Coronel Sapucaia, pero fue apropiada por los estancieros.
“Gran parte de la familia de Alex se encuentra en la Reserva Amambai, quienes, sensibilizados por el dolor de la pérdida y la necesidad de recuperar áreas de ocupación tradicional del Pueblo, decidieron retomar Tekoa Guapo’y dos días después del asesinato. Terminaron siendo expulsados inicialmente por policías y productores ganaderos, pero regresaron el 24 de junio, listos para ocupar la sede de estancia”, revelaron.
El área recuperada fue sustraída de la demarcación original de la Reserva Indígena, resultado de la política de reducción, confinamiento y colonización implementada por el Servicio de Protección al Indio (SPI) a principios del siglo XX.
“A lo largo de las décadas, estas pequeñas áreas, insuficientes para la supervivencia física y cultural de las Comunidades Indígenas, fueron sistemáticamente invadidas y deterioradas. Además de haber sido desplazados de su territorio de ocupación tradicional en nombre de una política de desarrollo basada en el monocultivo, incluso las minúsculas áreas reservadas a los Guaraní Kaiowá por el SPI fueron luego reducidas y transformadas en áreas en disputa”, señalaron desde CIMI.
En la Reserva de Amambai viven más de 10.000 Indígenas en apenas 2.400 hectáreas, o sea 4,16 personas por hectárea. La situación es un ejemplo de este contexto de falta de respeto a la Constitución Federal de Brasil, que garantiza a los Pueblos Indígenas el derecho a existir y a regularizar y proteger sus territorios.
Los Pueblos Indígenas, conscientes de sus derechos, han luchado por hacerlos efectivos en un proceso permanente de diálogo con los poderes del Estado brasileño, en especial el Ejecutivo y el Legislativo, lo cual les ha sido negado, vaciando así el legado constitucional de 1988.
En todo Brasil, los Pueblos Indígenas se han movilizado y denunciado este proceso de violencia alentado por el propio Estado, que los victimiza a ellos y a sus aliados, como lo ocurrido recientemente con el indigenista Bruno Pereira y el periodista Dom Phillips. La tragedia ocurrida en Mato Grosso do Sul contra los Guaraní Kaiowá confirma esta denuncia.
“El caso de Guapo’y también refuerza la necesidad de que el Supremo Tribunal Federal retome la sentencia del Recurso Extraordinario de repercusión general, en el que se discute la tesis lesiva e inconstitucional del marco temporal, defendida por los invasores y patrocinadores de la violencia contra los Pueblos Indígenas y sus luchas”, apuntaron en el comunicado.
Finalmente manifestaron que el CIMI se opone a cualquier intento de criminalizar a las víctimas de este ataque y llama a las autoridades y al Ministerio Público de la Federación a tomar acciones urgentes y efectivas para salvaguardar la vida de las Comunidades. “Es necesario que la Policía Federal se haga cargo de las investigaciones del caso, con la participación de un cuerpo de delegados y peritos federales de fuera del estado, para garantizar una mayor imparcialidad”, aseveraron.
“Los pedidos de justicia para Vitor Fernandes ahora se suman a los de Alex, Bruno y Dom, así como a los de decenas de Líderes Guaraníes y Kaiowás asesinados desde Marçal Tupã’i”, finalizaron.
“¡Nuestra sangre clama por justicia!”
La Gran Asamblea Aty Guasu Guaraní Kaiowá se hace pública mostrando su dolor e indignación con la acción cobarde de la Policía Militar y del estado de Mato Grosso do Sul contra la Comunidad y el territorio de Guapo’y.
“Este ataque ya está siendo llamado en todos nuestros territorios como Masacre de Guapo’y. Es otra acción ilegal más de la Policía Militar, que ha actuado como perro guardián del ruralismo y la pandilla política ruralista del Estado; niños, jóvenes, ancianos, familias que decidieron, luego de una larga espera sin alcanzar su derecho, retomar un territorio que siempre fue suyo y que fue robado, en el pasado, a nuestro Pueblo”, expresan desde el Aty. “Las imágenes de la masacre hablan por sí solas y son desgarradoras para el más duro de los seres humanos. Disparos a jóvenes desarmados, violaciones a personas entregadas, disparos desde helicópteros, todo con uso de munición letal, marcaron la pauta de la cobardía de una fuerza policial que actuó sin orden de desalojo”, manifiestan e indican, “nosotros, en Aty Guasu, llevaremos esta masacre a todos los ámbitos y no nos rendiremos hasta que los responsables sean sancionados y rindan cuentas. Exigimos el arresto inmediato y la rendición de cuentas del Gobernador del Estado de MS, del comando BOP/PM y del Secretario de Seguridad del Estado de MS”. Asimismo, queremos y exigimos la investigación y detención de tres personas más. De Nilton de la FUNAI de Amambai y de José de la FUNAI de Punta Porã por su coparticipación y facilitación de la masacre. Nuestro dolor no termina y ante los audios y evidencias, también pedimos la investigación y captura del Capitán de la Reserva Amambai, por facilitar la masacre. No podemos permitir que las divisiones internas sean instrumentalizadas por el Poder Público y que esto nos quite la vida”, aseguran.
“Todavía a tiempo, exigimos que el MPF de Punta Porã, que ha tardado en comprender la realidad impuesta, asuma su deber de defender nuestros derechos de inmediato, a riesgo de connivencia con todos estos actos de violencia contra Nuestro Pueblo”, indican desde la Asamblea.
Comunicado de la Gran Asamblea Aty Guasu Guaraní Kaiowá.
“Nos llena de indignación, tristeza y preocupación por la vida y seguridad de esta Comunidad”
La Articulación Ecuménica Latinoamericana de Pastoral Indígena (AELAPI), adhiere y manifiesta su solidaridad al Pueblo Guaraní Kaiowá.
“Las graves noticias que circulan en los medios de comunicación nacionales e internacionales sobre el ataque violento a la Comunidad Guaraní Kaiowá Tekoha Guapo´y, Amambai – MS, nos llena de indignación, tristeza y preocupación por la vida y seguridad de esta Comunidad”, expresan y agregan, “el Pueblo Guaraní Kaiowá, después de retomar nuevamente una parte del territorio de Guapo´y, que es su territorio tradicional, sufrió una terrible violencia por parte de policías militares y terratenientes. Invadieron el lugar retomado por los Indígenas con la finalidad de expulsarlos. Los indígenas relatan que no hay ninguna orden judicial que avale esta acción de tanta agresividad contra ellos”.
“La Comunidad Indígena de Guapo´y denuncia que la violencia contra su Pueblo fue cobarde y cruel, ya que en su mayoría son niños, jóvenes, mujeres y ancianos; familias que exigen el territorio para desarrollar su vida y cultura y demandan a las autoridades que esos territorios sean regularizados”, exponen y adicionan, “la Comunidad está aterrorizada y aprensiva con tanta violencia que viene sufriendo debido a su lucha por recuperar su tierra”.
Desde AELAPI solicitan a la Comunidad Internacional y al Supremo Tribunal Federal (STF), la más alta corte del país, que garanticen a los Pueblos el derecho originario, votando en favor de la vida y derecho de los Pueblos Indígenas y contra el Marco Temporal que tramita en esta corte como Recurso Extraordinario – RE 1.017.365/SC. “Repudiamos enérgicamente este ataque al Pueblo Guaraní Kaiowá de Tekoha Guapo´y que revela, una vez más, la violencia instalada en el país contra los Pueblos Originarios, que los criminaliza y provoca amenazas de muerte al no estar demarcados sus territorios”, aseveran.
AELAPI reafirma “el apoyo y solidaridad para con el Pueblo Guaraní Kaiowá de Tekoha Guapo´y, exige a las autoridades brasileñas y a las entidades de derechos humanos que se garantice la integridad física y la seguridad de la Comunidad a fin de evitar nuevos ataques, que se realice la debida investigación y se haga justicia, responsabilizando a los culpables del ataque a este Pueblo tan sufrido, que solo busca hacer realidad sus derechos territoriales para vivir en armonía y en paz”.
También envía su solidaridad y exige justicia para la Comunidad Kurupi/Santiago Kue, municipio de Naviraí – MS, que fue atacada por la policía militar, el mismo día que Guapo´y.
“El Pueblo Indígena Guaraní Kaiowá es un Pueblo pacífico, de una profunda espiritualidad. Pedimos a Ñande Ru que sea su luz, fuerza y resistencia para llegar, para siempre, a la Tierra Sin Mal”, señalan al final del comunicado.ENDEPA se solidariza con el Pueblo Guaraní Kaiowá sumando su repudio al de toda la sociedad capaz de entender que esta América es pluriétnica y multicultural, abogando por una rápida, justa y pacífica solución.